domingo, 10 de octubre de 2004

¿Ducha o baño?

Hablando el otro día con una amiga, salió el tema del aseo personal. Ella era partidaria del baño, y yo soy una ferviente seguidora de la ducha.

Yo me ducho todos los días (se ve que Psicosis no dejó huella en mi), y si hace mucho calor hasta 2 ó 3 veces diarias. Me encanta, no hay nada mejor que comenzar el día con una buena ducha que te relaja y espabila al mismo tiempo. En verano se agradece más que en invierno, es verdad, pero sin una ducha en condiciones no soy nadie. Esos 5 minutos todos para ti, sin que nadie te moleste, mimando tu cuerpo serrano con un buen fregoteo es una delicia! Deseas que no se acaben nunca, aunque claro, eso es imposible.
Pero mi ducha tiene un fallo: el calentador es de gas, y no sé como lo hago, siempre se me acaba la bombona a mi cuando estoy con la cabeza enjabonada y en plena faena! Sal de la ducha cagándote en tó lo que se menea, ponte un albornoz, sal fuera y cambia la dichosa bombona sin que te vea el vecino con esas pintas!

Con el baño no puedo. Muy mal tengo que estar para meterme en la bañera, y en casos extremos lo hago porque estoy realmente congelada y es la única manera de entrar de nuevo en calor. Me deja tan floja y sin pilas, que salgo peor que cuando entré. Tal vez sea también porque tengo una bañera más bien pequeña, nada de un jacuzzi con chorros por todos lados tipo Gran Hermano, y no vale ahora sacar el tema de bañarse en buena compañía, porque eso también se puede hacer en la ducha, jeje.
Sin embargo a los niños pequeños se les baña siempre. Yo meto al peque en remojo para que se le vaya bien toda la suciedad y porquería que pueda acumular un enano de 4 años, y le dejo así por lo menos 20 minutos. ¡Cuando sale parece un garbancito!

Como sobre gustos no hay nada escrito, os dejo con esta preguntita: ¿Qué preferís, ducha o baño?

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