martes, 15 de mayo de 2007

El calentador

Domingo por la mañana. Me despierto a las 10, hala! Claro, la noche anterior tuvimos cena con amigos hasta tarde. Bueno, por lo menos no tengo resaca porque soy de poco beber. Me apetece una buena ducha para despejarme. Abro la ducha, y espero hasta que llegue el agua caliente. Un minuto, dos minutos, tres minutos…

“Chuuuurrrrriiiiiiii! Anda, mira a ver si se ha apagado el calentador, que no sale agua caliente!!!”
“Grrrrggrrgrgrgrgr……………. Bueeeeno, vaaaale, voy.”

Pero no, no conseguimos poner en marcha el calentador. Por alguna razón la llamita está encendida, pero no salta al ponerlo en marcha. Mi Churri me promete que después del desayuno limpiará el calentador.

Dos horas más tarde, me viene con cara de culpable. Al abrir el calentador, ha intentado limpiar no se qué, y se ha cargado el tubito de gas que va a no sé dónde.

Genial. Estamos sin agua caliente. Y yo soy incapaz de ducharme con agua templada, imagínate con agua fría!!!! “Mañana llamo al técnico, a ver si lo puede arreglar”.

A los niños les perdonamos la ducha esa noche, y nosotros nos aseamos como podemos.

Pero el técnico que llamamos el lunes, no puede venir hasta el martes a mediodía. En cuanto ve el calentador, pone cara de enterao, suelta un “uuuuuuu” por la boca, y me dice que no hay nada que hacer. El calentador está calcificado por todas partes, y no se puede arreglar. Le pagamos los 15 euros de la visita, y se va. Y seguimos sin agua caliente.

Mi Churri ha sido lo suficientemente listo como haber hecho ya un estudio de mercado de calentadores de gas (por si no se podía arreglar el nuestro), y sabe ya cuál hay que comprar. Lo compramos el martes por la tarde (320 euros, ay como duelen!), peeero, no nos lo instalan. Y nuestro fontanero Manoloelfontanero (conocido desde hace 25 años y de toda confianza) no puede hasta el jueves.

A todo esto, llevamos 2 días lavándonos 5 personas con barreños de agua caliente (calentado en dos ollas grandes en la cocina). Con una jarra nos mojamos, luego nos enjabonamos y después nos aclaramos echándonos otra vez agua con la jarra. El pelo ha sido previamente lavado en el lavabo por el mismo sistema y con mi ayuda. La Ministra debería darnos una medalla por el ahorro de agua.
El Peque ya ha proclamado que este método de aseo le gusta muchísimo más que el baño clásico, ya que es mucho más rápido y así tiene más tiempo para jugar.

Miércoles por la mañana. ¡Sorpresa!
Me llama Manoloelfontanero, y me dice que nos ha hecho un hueco y que si puede venir ya.
¡Por supuesto! Le saco la alfombra roja, y pone manos a la obra. El hombre está sudando la gota gorda porque está a pleno sol y hace mucho calor. Le doy una cervecita y le pongo una sombrilla, que a Manoloelfontanero hay que cuidarle, y mucho!!! En 3 horitas está todo listo. Nos cobra 75 euros por la instalación y 36 por el material que ha tenido que comprar, y se va.

¡Ya tenemos agua caliente! Igual que el sábado anterior, pero 446 euros más pobres.