Su discurso parece estar dirigido a niños de educación infantil. El resto de los diputados presentes no pueden aguantar el asombro y las risas ante la nula capacidad para la oratoria durante su intervención.
Entre las 'joyas' de Teruel se encuentra una frase dedicada al presidente de la Cámara: "si, cariño mío, lo que tú quieras". Entre risas trémulas, glosa el discurso de la consejera en un confuso batiburrillo de expresiones coloquiales y tópicos huecos de este estilo: «Conforme la escuchaba, yo estaba cada vez más encantada» o «se tiene en cuenta la diversidad de la sociedad, pero no para llenarnos la boca, sino que se tiene en cuenta de verdad, y eso es fantástico; muchas gracias, señora consejera». Sinceridad no le falta al admitir: «Estoy aturdida, porque aún no tengo clara mi función como portavoz». Y tras apoyar la asignatura de Educación para la Ciudadanía para que haya aragoneses «con valores y principios», concluye: «Ahora va a hablar usted, que me va a levantar el ánimo».
¡Prometo que el video no es ninguna broma de Inocente Inocente!
